Series alemanas en México
"Bárbaros": estudia latín con golpes y puñaladas
"Armin quedó ante Varus triunfante. 9 d.C., eso es muy importante". Esa mnemotecnia debería recordarles la tediosa clase de historia a quienes tuvieron que padecer la Antigüedad y los anales del sabio romano Tácito. Sin embargo, la primera épica histórica de Netflix, Bárbaros, en la que se cuenta la Batalla del Bosque de Teutoburgo durante seis episodios, es todo menos aburrida. Pero no solo los diálogos extraños despiden el moho de las polvosas clases de latín.
De Angela Zierow
Todo empezó de manera muy alentadora: con esos anuncios en latín poco antes del estreno, los publicistas de Netflix consiguieron que muchas redacciones de medios cinéfilos sonrieran con aprobación. Pero el gusto no nos duró mucho: Bárbaros resultó no ser ni la mitad de original que su campaña publicitaria. Peor aún, la clase de historia en seis partes degeneró en una telenovela histórica casi sin sustancia que presumía un estilo pandroso con todo y guardarropas de piel chic, audaces peinados de greñas trenzadas y abundantes chorros de sangre. Naturalmente, también hay un arriesgado triángulo amoroso, cabezas rodantes y la crucificción obligada. Eso no sería particularmente dramático si la serie pudiera sorprender con un par de ideas originales, giros entretenidos en la trama o siquiera un guiño en algún lugar. Los golpes y puñaladas convencionalmente representados querían ser tan cool como Vikingos o tan dementes como Britannia, pero acabaron con la burdeza de una aventura de folletín. ¿Hay tensión? Moderada. A fin de cuentas, es bien conocido quién masacró a quién en las huestes de Varus o en las de Hermann; hay poco espacio para el spoiler.
Es mucho más sorprendente que sea la primera vez que una producción televisiva trate la legendaria batalla en la que el Imperio romano sufrió una derrota hasta entonces inimaginable. La masacre tuvo consecuencias importantes: frenó en seco el anhelo expansionista de los romanos en Germania y fue un parteaguas en la historia de todo el continente. Bajo el liderazgo de Arminius, rey de los queruscos, también conocido como Hermann, una alianza de tribus germánicas segó tres legiones romanas junto con sus tropas auxiliares en el otoño del año 9 d.C., aunque sus adversarios los superaran en número. La ingeniosa emboscada les costó la vida a al menos quince mil romanos, una octava parte de su ejército. El comandante, Publius Quinctilius Varus, se dejó caer sobre su propia espada por la deshonra. Los arqueólogos localizaron el escenario del baño de sangre de varios días cerca de Bramsche-Kalkriese, en Osnabrücker Land, donde las excavaciones desenterraron innumerables hallazgos de la lucha.Bárbaros relaciona los antecedentes de la batalla con el destino de un trío de amigos: Folkwin (David Schütter), Ari (Laurence Rupp) y Thusnelda (Jeanne Gourseaud) están unidos por un juramento desde el kínder. Mientras que Ari y su hermano son entregados a los romanos como garantía de paz por su padre, rey de una tribu querusca, Folkwin, el guerrero, y Thusnelda se quedan en la aldea. Los amigos de la infancia no tardan en convertirse en pareja clandestina, pues ella, por ser hija de un noble, está comprometida con alguien más. Ari, ahora bautizado como Arminius, regresa años después a su patria. Como hijo adoptivo del comandante y gobernador Varus (Gaetano Aronica), hizo carrera en Roma y fue nombrado líder de las tropas auxiliares de su nuevo padre. Ahora debe ayudar al comandante a poner de rodillas por fin a los pueblos germánicos. Por esa razón, el regreso le despierta sentimientos encontrados. Mientras tanto, en las aldeas de las tribus germánicas —sumidas en disputas internas— caldean mucho los ánimos. Los altos tributos y las represalias brutales hacen que se oiga cada vez más fuerte el llamado a un fin de las querellas y a una resistencia en común. Cuando precisamente Folkwin y Thusnelda se roban el estandarte de águila de Varus, Arminius debe decidir: ¿Traicionará a su padre adoptivo para ayudar a sus amigos de la infancia? El resto es historia.
El equipo de encargados del programa y autores conformado por Andreas Heckmann, Arne Nolting y Jan Martin Scharf (Weinberg) eligió un elenco de actores jóvenes y de veteranos de las series como Bernhard Schütz (Eichwald, MdB), Ronald Zehrfeld y Sophie Rois. Laurence Rupp (Vienna Blood), ganador del Premio de Cine Austriaco de 2019, representa a un Arminius dividido entre dos mundos con mirada melancólica; Jeanne Gourseaud (In Your Dreams), la hija rebelde de un noble, y David Schütter (Wir sind jung. Wir sind stark) juegan a superarse tanto en las refriegas verbales como en la batalla. Por eso es aún más molesto que la desafortunada mezcla de habla acartonada de teatro al aire libre y de cháchara de telenovela para adolescentes arruine algunos diálogos y le robe mucha fuerza a la dinámica explosiva del trío. En vista de la trama nada compleja, el latín declamado con acento italiano de los legionarios romanos ayuda poco.
Cuando además una Thusnelda estéticamente salpicada de sangre tiene el pelo lindo en pleno combate salvaje, los guerreros emergen prístinos de un drenaje de letrinas y la ropa de piel parece recién encerada hasta cuando está cubierta del fango más denso, Bárbaros cae por fin en el género de basura histórica. Ahí también se queda la serie durante un final de acción venido a menos y sin finezas escénicas dignas de mención, en el que las espadas obligatoriamente en llamas trozan cabezas en cámara lenta. Resulta aún más decepcionante porque Steve Saint Leger, el director de los últimos dos episodios, ya había recabado experiencia de batalla en Vikingos y los actores fueron entrenados, entre otros, por el coreógrafo de peleas Richard Ryan (Troya).
El eco en la prensa fue debidamente reservado, spiegel.de incluso aconsejó a sus lectores: "Ni siquiera la vean". Quizás eso sea demasiado duro, pues los espectadores a quienes les emocionen las secuencias de batalla chabacanas y el desamor desgastado pueden entretenerse aceptablemente con Bárbaros, y una o dos cervecitas hacen que el diálogo torpe parezca mucho más fluido. Evidentemente, muchos usuarios de Netflix fueron de la misma opinión. La serie alcanzó la punta de lo más visto en cine y series en el servicio de streaming. Ya se está planeando una segunda temporada. Tal vez por fin funcionen los diálogos.
Créditos:
Título: Bárbaros; fecha 2020; director: Barbara Eder, Steve St. Leger; elenco: Laurence Rupp, Jeanne Goursaud, David Schütter, Bernhard Schütz, Gaetano Aronica, Ronald Zehrfeld, Sophie Rois; duración: 6 capítulos de aprox. 50 minutos, exclusivamente en Netflix desde el 23 de octubre de 2020.