Vuelve el público, baila Steven Spielberg y el Oso de Oro se lo lleva un documental francés. ¿Qué más sucedió en la Berlinale?
Su documental Sur l'Adamant está dedicado a la vida cotidiana en una clínica psiquiátrica ubicada en una casa flotante a orillas del Sena. El documentalista francés de 72 años (Être et avoir, 2002) acompañó a los pacientes durante varios meses. Hablan abiertamente sobre sus miedos y deseos. La presidenta del jurado, Kristen Stewart, calificó a Sur l'Adamant de "película magistralmente diseñada" en la gala de clausura.

Artesanía sólida
Sin embargo, la película no fue considerada favorita en el período previo a la ceremonia de premiación. Un total de 19 entradas de 19 países compitieron por los Osos de Oro y Plata, incluidas muchas películas de autor, pero también thrillers y melodramas. Incluso un anime (Suzume) estaba allí. En cuanto a temática y forma, el programa de competición fue variado, si bien se movió mayoritariamente en el nivel de mediocridad artística. Era más probable encontrar un cine innovador y que marca tendencias en otras secciones del festival. ¿Es de hecho siquiera posible identificar una obra con un brillo sobresaliente en esta competencia cualitativamente sólida? Al final, el jurado de siete miembros encabezado por la estrella estadounidense Kristen Stewart eligió principalmente a directores consagrados al otorgar el premio.Historias familiares
El también francés Philippe Garrel (Le sel des larmes, 2020) recibió el premio de dirección por Le grand chariot. Su película cuenta la historia de una familia de titiriteros en crisis existencial, y el director incluyó en ella a tres de sus propios hijos. Es una historia dentro de otra historia, lo cual podría ser original si la trama no fuera contada tan lentamente.
Tres veces plata para el cine alemán
Tres de un total de cinco participantes alemanes en la competición se llevaron a casa un Oso de Plata. El invitado permanente de la Berlinale, Christian Petzold, recibió el Gran Premio del Jurado por su –maravillosamente ligera– comedia trágica Roter Himmel, un honor largamente merecido para el excepcional director berlinés. Después de Undine, la película es la segunda parte de su trilogía romántica, y Paula Beer también tiene aquí un papel principal.
La ganadora más joven del Oso
Pero el jurado concedió este trofeo a Sofía Otero. En la película española sobre la mayoría de edad 20.000 especies de abejas, la niña de nueve años encarna de manera creíble a una chica que busca su identidad de género. La película, ópera prima atmosférica y sensible de la directora vasca Estibaliz Urresola Solaguren, hubiera sido también una candidata irresistible al Oso de Oro.
Tantos sitios de construcción
Fue la cuarta Berlinale bajo la dirección de Mariette Rissenbeek y Carlos Chatrian. Y, como se ha dicho muchas veces, fue la primera sobre la que la pandemia no echó su sombra. Pero a pesar del cine cara a cara sin máscaras, el goce del festival no fue completo: el Berlinale Palast, el tradicional centro del festival, estaba en medio de un sitio de construcción, y los caminos a los lugares estaban bloqueados por vallas y barreras. Los cines de la Berlinale estaban repartidos por diferentes distritos, así que quien quisiera ver muchas películas tenía que moverse todo el tiempo de un lado a otro. Y desafortunadamente, la ciudad no facilitó los desplazamientos para los fanáticos del festival: un servicio de reemplazo de trenes para el S-Bahn y el U-Bahn operaba a intervalos irregulares.Política y celebridades
Pero igual fue imposible asustar a la audiencia. Los organizadores reportaron altas cifras de ventas. Esto también puede deberse al hecho de que la dirección del festival contó este año con un número inusual de famosas y famosos: Anne Hathaway asistió a la película de apertura, Steven Spielberg hizo un pequeño baile en la ceremonia de premiación, Sean Penn presentó su documental sobre Ucrania, Superpower, y Kristen Stewart, presidenta del jurado, fue el rostro de la Berlinale durante diez días.
Con su hábil combinación de programa de cine de arte, misión política y alineación de estrellas, Mariette Rissenbeek y Carlo Chatrian hicieron muchas cosas bien: como todos los festivales importantes, la Berlinale no se juzga únicamente por sus películas.
febrero 2023