Biblioteca, Universidad Autónoma de México (UAM), Azcapotzalco, CDMX
"Diversidad" de Colectivo Chiquitraca
La muerte como un poder de juicio sobre todo y todos: esto es exactamente lo que el colectivo de artistas Chiquitraca de Juchitán, en el estado mexicano de Oaxaca, está tratando de expresar en colaboración con otros artistas mexican*s. Juntos crearon un mural en el campus de la Universidad Autónoma Metropolitana Azcapotzalco (UAM) en la Ciudad de México.
Con motivo de un evento sobre la igualdad de género y la diversidad que tendrá lugar del 21 al 22 de enero de 2020, se desarrollaron proyectos de arte de artistas y estudiantes mexican*s en el campus de la UAM en la Ciudad de México, uno de los cuales es el mural de Chiquitraca.
La colorida obra de arte, que el colectivo Chiquitraca ha producido en Azcapotzalco junto con artistas de otros colectivos mexican*s, se extiende sobre un lienzo de ocho metros. Dos mantis se destacan claramente del centro del lienzo. Se paran uno frente al otro en poses de baile, mientras que a sus lados dos máscaras miran directamente al espectador. Las dos máscaras se diferencian entre sí por sus características: una tiene claros rasgos femeninos y la otra masculinos. Ambos están adornados por huesos y cráneos. Las máscaras representan los diferentes sexos, así como las mitades de los ángeles pintadas por Gotha (un artista perteneciente al colectivo Chiquitraca), que se pueden ver en ambos extremos del lienzo. Al igual que las máscaras, los ángeles tienen rasgos tanto femeninos como masculinos. "En realidad", admite Gotha, "un ángel representativo del tercer sexo debería estar todavía en el centro del lienzo", pero los artistas deberían haber rechazado finalmente su idea. Sin embargo, la obra de arte debe mostrar la igualdad de todos los géneros en la sociedad.
Los elementos que representan a los sexos están adornados por diversos animales: cuervos, libélulas y lobos adornan la obra de arte y le dan aún más riqueza, al igual que las flores y plantas, que brillan con colores vivos. Todos los diferentes elementos hacen que el observador vea más y más detalles a medida que continúa mirando, por ejemplo los patrones en las esquinas inspirados en la cultura maya o las coloridas libélulas que parecen volar a través del cuadro. Todas ellas, como las máscaras, combinan atributos de la muerte y una conexión con la cultura mexicana.
En lugar de peces, se ven espinas de pescado, y varios cráneos parecen estar escondidos en el cuadro. Se supone que los animales representan la libertad en sí misma, pero también la libertad de los sexos. "La tolerancia antes del desarrollo personal es, lamentablemente, un elemento que suele faltar en la sociedad mexicana", dice Gotha.
La colorida obra de arte, que el colectivo Chiquitraca ha producido en Azcapotzalco junto con artistas de otros colectivos mexican*s, se extiende sobre un lienzo de ocho metros. Dos mantis se destacan claramente del centro del lienzo. Se paran uno frente al otro en poses de baile, mientras que a sus lados dos máscaras miran directamente al espectador. Las dos máscaras se diferencian entre sí por sus características: una tiene claros rasgos femeninos y la otra masculinos. Ambos están adornados por huesos y cráneos. Las máscaras representan los diferentes sexos, así como las mitades de los ángeles pintadas por Gotha (un artista perteneciente al colectivo Chiquitraca), que se pueden ver en ambos extremos del lienzo. Al igual que las máscaras, los ángeles tienen rasgos tanto femeninos como masculinos. "En realidad", admite Gotha, "un ángel representativo del tercer sexo debería estar todavía en el centro del lienzo", pero los artistas deberían haber rechazado finalmente su idea. Sin embargo, la obra de arte debe mostrar la igualdad de todos los géneros en la sociedad.
Todos son iguales ante la muerte
Jesús Vicente alias Gotha