Sebastian Meschenmoser
Residencia para artistas en Chocó
La rana más venenosa del mundo, la temible rana dardo dorada, tiene su hábitat en el Chocó. Con este anfibio se topó en la selva el artista visual Sebastian Meschenmoser. Además, vio ballenas y delfines cuando fue en bote al pueblo Coquí para dar clases de dibujo a los alumnos de la escuela del lugar. Durante su residencia, lo que más impresionó a Meschenmosser fue la gran influencia de la naturaleza en su vida cotidiana. El tiempo determinaba gran parte del programa del día, la alta humedad ablandaba el papel y dificultaba el dibujo. Entonces tomó muchas fotos y reunió historias de los pobladores. Hoy dice: “Cuando ha pasado mucho tiempo allí, uno empieza a creer las anécdotas más extrañas”.
La estadía de Sebastian Meschenmosser fue organizada por la biblioteca del Goethe-Institut.