A principios de 2024, realicé una pasantía DaF de tres meses en el Colegio Alemán Rudolf Deckwerth en Santiago de Chile, una escuela a la que se puede llegar fácilmente en metro desde el centro de la ciudad (ver foto arriba). Se puede encontrar información general sobre la institución educativa en la página web oficial, el canal de Instagram o el perfil de PASCH. Este último contiene un enlace al contacto de coordinación de PASCH para Cono Sur, a quien definitivamente debes contactar por correo electrónico antes de elegir un colegio. A continuación, quisiera darles una visión lo más amplia posible de mis experiencias personales en el extranjero.
Como sugiere el graffiti del patio (véase la foto de abajo), puedes probar y desarrollarte libremente en una amplia gama de actividades. La escuela te ofrece la oportunidad de probar y enseñar en todos los niveles y en diversas asignaturas/temas. El profesorado, increíblemente creativo y autocrítico, te apoyará en todo momento. Estarás en estrecho contacto con todo el mundo a través de la comunidad de aprendizaje, el consejo de profesores/as, los talleres extraescolares (por ejemplo, sobre escritura creativa) o las reuniones recreativas (asados, por ejemplo). También puedes participar en veladas de padres o en excursiones educativas a lugares interesantes de Santiago para conocer mejor al alumnado.
Me impresionó la confianza que depositaron en mí para que participara activamente en todas las actividades. Tuve la sensación de ser un miembro más del personal. La escuela es como una gran familia. Todo el mundo te tutea desde el primer día y se alegra de verte. Aunque las clases de alemán son de nivel A1/A2, a partir del nivel intermedio también abordamos temas controvertidos como las relaciones de género, las dictaduras, la migración y la protección del medio ambiente.
Fue un reto especial incluir a todos/as los/as alumnos/as en mis clases, ya que los problemas organizativos ajenos a la asignatura de alemán, la forma cotidiana de los individuos, las preferencias metodológicas individuales u otros factores desbarataron una y otra vez mi planificación mensual/semanal. A diferencia de lo que ocurre en muchas escuelas de Alemania, esta dinámica se ve intensificada por el hecho de que los/as niños/as y jóvenes proceden de entornos familiares socioeconómicamente difíciles de la periferia. Enfrentarme a estas circunstancias me ha hecho darme cuenta de lo importante que es mi papel como educador. En este ambiente escolar aprendí a establecer relaciones de consideración con los alumnos y las alumnas en lugar de medidas punitivas (anotaciones estúpidas, reprimendas excesivas, dejar de mostrar consideración, etc.). Si demuestras a cada niño/a que le reconoces con todas sus luces y sombras, recibirás a cambio el respeto correspondiente. También es importante mencionar esto: El alemán no es la asignatura preferida de todos los/as niños/as. Para reducir el riesgo de frustración como docente, debes bajar las expectativas. En mi opinión, deberías dominar el español como requisito obligatorio, tanto por los acuerdos con otros/as docentes, pero sobre todo por la interacción social en general.
Hay un punto que me interesa especialmente y que me gustaría volver a subrayar aquí: desde una perspectiva alemana/europea, es desfavorable actuar en Chile/Latinoamérica con una actitud arrogante de sabelotodo, hacer vacaciones cortas por todo el continente con aerolíneas de bajo coste y dedicarse al “etnoturismo”. Porque la gente en Chile sabe cómo los alemanes han colonizado e intentado “civilizar” el sur del país, en particular durante los últimos siglos. Te recomiendo que te familiarice con el pasado de tus antepasados y con la historia de Chile en general. Los artículos en línea “Migrantes alemanes en Chile y su odio a los mapuches” de la Sociedad para los Pueblos Amenazados y “Colonias alemanas en Chile” del Goethe-Institut le proporcionarán información al respecto. También se puede encontrar abundante material en todas partes, como las películas “¡No!” y “Colonia Dignidad”, en el Museo de la Memoria y de los Derechos Humanos o en el Estadio Nacional (¡con reserva previa!).
Antes de darte una lista de consejos prácticos para preparar tu estancia en el extranjero, permíteme resumir: el esfuerzo burocrático merece la pena para hacer una práctica en una metrópolis loca y apasionante como Santiago, sobre todo si tienes la suerte de trabajar en una institución como el Colegio Alemán de Puente Alto. Es una experiencia que te llevarás contigo el resto de tu vida.