Fotoreportaje
Berlín es asombrosa vista desde los ojos de un fotógrafo colombiano
El fotógrafo Juan Camilo Roa vive en Berlín desde hace diez años. En sus fotos, la vida cotidiana de la ciudad está llena de sorpresas, belleza y una fascinación visual inesperada.
Mi nombre es Juan Camilo Roa. Nací en Bogotá y vivo en Berlín desde 2005, donde estudié Musicología y Lingüística. La fotografía me ha interesado desde siempre. El detonante para empezar a tomar fotos regularmente fue Instagram, que me permitió publicar fotos fácilmente en internet, desarrollar mi visión como fotógrafo y conocer a otros miembros de la comunidad de Instagram. Hasta ahora, todas mis fotos las he hecho con un iPhone. Pienso que esto le da a mis fotos un carácter más espontáneo.
Desde que empecé a tomar fotos regularmente me he vuelto cada vez más sensible a mi entorno. Caminando por Berlín encuentro elementos, situaciones, objetos o formas que para otras personas pasan desapercibidos, pero que para mí son la materia prima para mis fotografías. Éstas se han convertido en una especie de “fotodiario”, que reúne no sólo imágenes de Berlín, sino de muchos otros lugares del mundo que he visitado.
Los elementos de mis fotos son los colores (y en especial los contrastes entre colores), las líneas, figuras geométricas y perspectiva, así como juegos de luz y sombra. Estos elementos los encuentro en la arquitectura y en objetos cotidianos dispuestos de una forma especial (como una fila de carros de mercado). Me interesa mostrar situaciones del día a día con las que cualquier persona se puede topar en la ciudad, pero que muchos pasan por alto, y que sin embargo tienen un gran potencial estético. Me interesa mostrar que lo ordinario puede ser muy especial.
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Explorando el barrio Köpenick, en el suroeste de Berlín, encontré una casa abandonada en la que la luz de sol proyectaba unas sombras que hacían juego con la geometría de los marcos de las ventanas. Al preparar la toma quise aprovechar los elementos del espacio, que producían un cuadrado perfecto, dándole así un marco a la imagen.
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En este caso me llamó la atención el juego de colores, figuras geométricas y líneas. Incluso el color de la chaqueta de la mujer que aparece en la foto armoniza perfectamente con el entorno. Esta foto fue tomada en el barrio Tiergarten de Berlín, en el “Bauhausarchiv”, un museo que colecciona y expone objetos producidos por la famosa escuela de arquitectura y diseño Bauhaus.
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Esta foto fue tomada en Berlín-Köpenick. En el fondo se ven viviendas para acoger a refugiados, hechas a partir de contáiners.
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Berlín en su máxima expresión: uno de los cientos de ciclistas que se ven a diario en la ciudad cruza frente a un carro de Currywurst, la salchicha típica de Berlín. En el fondo de la foto se ve una fachada del Museo de Bode, en la Isla de los Museos en el barrio Mitte. En la parte superior de la foto aparece un tubo, también típico de Berlín, usado para transportar agua subterránea resultante de las excavaciones por construcción hacia el río Spree.
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En este caso, mi idea era tomar una foto de un “bus-biblioteca” (Bücherbus). Una de las tomas que hice mostraba a una ciclista que pasaba frente al bus, dándole más fuerza a la foto. La foto fue tomada en la esquina Heinrich-Heine-Straße con Köpenicker Straße, en el barrio Kreuzberg.
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Esta foto la hice desde el tercer piso de un edificio donde trabajé durante algunos años, en el barrio Prenzlauer Berg. Lo que durante muchos años fue un parqueadero, se convirtió en un edificio de apartamentos lujosos. Aquí me llamaron la atención sobre todo los colores y las líneas blancas en el piso, separadas irregularmente la una de la otra.
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Esta foto fue tomada en la “Capilla de la Reconciliación” (Kapelle der Versöhnung) en la Bernauer Straße, en el barrio Mitte. Al entrar el sol por las rendijas de la fachada se producen sombras que le dan un ambiente especial a este lado de la iglesia. Las sombras varían dependiendo de la posición del sol.
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Parecería que esta mujer se hubiera vestido especialmente para esta foto: el color de su pañuelo, de su vestido y de su cartera combinan con los colores de la estación de metro. Foto tomada en la estación Kottbusser Tor de la línea U8 del metro de Berlín, en el barrio Kreuzberg.
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Fachada de la piscina pública en la plaza Spreewaldplatz, en Kreuzberg. Actualmente, la fachada está pintada de blanco y azul claro, y ya no queda nada de los colores que se ven en esta foto.
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Esta foto la tomé en el aeropuerto de Tempelhof, que hoy en día es un inmenso parque público, donde es posible transitar libremente por las antiguas pistas de aterrizaje. En este motivo no sólo me llaman la atención los colores sino también la sensación de amplitud, generada por el tamaño del ciclista en relación a la pista de aterrizaje, la extensión del campo en el fondo y la porción de cielo que ocupa casi dos terceras partes de la foto.
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La estación de trenes de Alexanderplatz, en el barrio Mitte, es una de mis favoritas, a causa del color de las baldosas que cubren las paredes y los espacios como el que se ve en la foto, los cuales dan la impresión de estar dentro de un laberinto de varios pisos. El toque final lo da el hombre bajando por la escalera eléctrica, quien me hizo en la soledad en la que viven muchos ancianos en Berlín.
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La idea detrás de esta foto, tomada en la Joachimsthaler Straße, en el barrio Wilmersdorf en el oeste de Berlín, es puramente gráfica. Aquí quería jugar con la sombra que el techo proyecta sobre el suelo y con la perspectiva, las cuales crean casi un triángulo en el cual está enmarcado un momento cotidiano en esta calle.
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Esta foto la tomé desde la la terraza del edificio del Reichstag, en el barrio Tiergarten. En el horizonte se ven algunos de los símbolos de Berlín: la torre de la televisión, la catedral de Berlín, la alcaldía y las grúas de construcción. De esta foto me gusta particularmente el pequeño toque de color del suéter del hombre, que contrasta con el gris del cielo (algo muy común en Berlín) y los colores del entorno.
