Dirección: Stefan Westerwelle 2020, color, 98 min
Into the Beat - Tu corazón baila
Dirección: Stefan Westerwelle 2020, color, 98 min
Para Katya, una estudiante de ballet de Hamburgo, el duro entrenamiento para conseguir una beca en la Academia de Ballet de Nueva York es casi una cuestión de rutina, ya que es la hija de Victor Orlow, un célebre bailarín de ballet que cuida solo de Katya y de su hermano pequeño, Paul, tras la muerte de su esposa. Sólo quedan tres semanas para el examen bajo el despiadado mando de la profesora de danza. Un día, de camino a la escuela, Katya descubre una nave industrial, donde también se baila. Aun así, se baila otro tipo de música y con movimientos acrobáticos e impetuosos. Así es como Katya se sumerge en la escena del hip-hop, se siente libre, se siente reconocida y, también, conoce al bailarín Marlon. Cuando más empieza a sentir que esta es su forma de expresión, más entra en conflicto con su querido padre, el que a partir de un accidente ya no puede volver a subir al escenario. La hija, sin embargo, se siente obligada a seguir con la tradición familiar del ballet. Katya debe tomar una decisión.
Un defecto en la bici, con la que diariamente se mueve Katya por Hamburgo, un maravilloso y dinámico lugar donde rodar, y con la que va a la escuela de ballet, la lleva inesperadamente por otro camino. Esto ocurre casualmente al lado de una nave industrial: en la “casa de baile Battle-Land”, un hecho que descubre posteriormente. Aquí se abre un mundo nuevo para Katya: el streetdance (baile callejero) que, al contrario que el ballet clásico, no tiene reglas, es libre y explosivo, donde parece que las leyes de la gravedad no existen, un mundo en el que se adentra con asombro y duda al principio. Se deja llevar por la inminente y rítmica música, los movimientos acrobáticos y se mezcla con los jóvenes streetdancers. Despreocupación y espontaneidad: un claro acto de libertad. Aquí puede expresar sus emociones y conoce al introvertido Marlon, un talentoso bailarín de hip-hop. Él ve el talento de Katya y le propone participar en una audición mundialmente conocida de streetdance "Sonic Tigers". Cuanto más se adentra en este mundo, ve cada vez más claro que el ballet no puede ser su futuro. Primero tiene que convencer a su padre y le invita junto a su hermano a una exitosa presentación, donde ve una tranquilizante sonrisa cuando los ve desde el escenario.
Stefan Westerwelle, director y coguionista, ha creado una fugaz, entretenida, y al mismo tiempo seria película juvenil, que trata sobre los sueños de la vida, que sin ánimos moralistas también pone en debate cuestiones como “¿qué es sólo una obligación? o ¿cuán importante es seguir los propios sentimientos?”.
Christel Strobel (24.02.2022)
Críticas, Recomendaciones, Reseñas de Prensa:
“La película vive del apasionado enfrentamiento puesto en escena de dos “estilos”, dos tipos de baile y dos proyectos de vida. Katya repite en varias ocasiones que principalmente ama el ballet, pero cuando baila hip-hop todo es diferente: “Todo arde, esa soy yo”. Aunque realmente se trata de algo más que de bailar; cuando ella, como “estrella”, y Marlon, como “extraterrestre’”, crean su propia actuación, tratan más bien su lugar en la vida, por muy aventurero e imponderable que sea al principio. Las coreografías de la renombrada academia “Flying Steps”, que ha puesto el listón muy alto en la escena de la danza callejera en este país, sin duda dan un toque auténtico a la película. Realmente se convierte en algo especial gracias a la interacción de la joven actriz Alexandra Pfeifer (Katya) y Yalany Marschner (Marlon). Ambos viven su papel y se convierten en personajes reales, expresivos y muy vitales. (Horst Peter Koll, www.kinder-jugend-filmportal.de)
FBW Prädikat (página web de reseñas cinematográficas): “especialmente valiosa”, valoración por parte del jurado:
“El director, Stefan Westerwelle, consigue hacer en su película, que el contraste entre el ballet y la danza callejera, tan formulista a primera vista, entre una hija de buena familia y un chico de origen difícil, sea danza en el sentido más estricto de la palabra. Incluso cuando la película tropieza con clichés a la hora de describir y definir las figuras, consigue realzarse con acertadas coreografías, así como con composiciones que aciertan el ritmo y la música. Cabe añadir el excelente ojo para las locaciones, que hacen que Hamburgo parezca una gran ciudad carismática con un toque internacional. La típica historia sobre la transición a la mayoría de edad, en la que Katya debe encontrar su camino, gana poder persuasivo a pesar de su forma convencional de contar la historia”.
FBW-Jugendjury (jurado juvenil): “El contraste entre los dos mundos diferentes se reconoce en las dos figuras. Katya es muy familiar y Marlon aprendió bien joven a cómo sacarse las castañas del fuego. Recomendamos la película a partir de los 11 años, ya que hay temas para los más jóvenes, e incluso, para más mayores que no se van a poder poner en lugar de la otra persona, es decir, que no van a llegar a entender. Por otro lado, la película es adecuada para un amplio rango de edad. La película también anima al público a cumplir sus sueños y a emprender nuevos caminos”.
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