Cuando se menciona el término "A8", los alemanes piensan en uno de los ejes este-oeste más importantes del país, la famosa pero también tristemente célebre autopista 8 por su naturaleza propensa a los accidentes. Sin embargo, el nombre A08, el primer proyecto que presentamos en el Popcast del nuevo año, no está inspirado en su homónima autopista, a pesar del inconfundible elemento de conexión del dúo berlinés, sino que es una abreviatura de su anterior proyecto Africaine 808. Sin embargo, la referencia funciona. Dirk Leyer y DJ Nomad colaboran con artistas de Ghana, Colombia, Kenia y Alemania para dar vida a su proyecto de músicas electrónicas del mundo. La mezcla resultante de reggae, jazz, folclore caribeño y electro, que acaba de publicarse en el sello de downbeat muniqués Compost bajo el título Waiting for Zion, impresiona por su versatilidad, que al mismo tiempo representa su debilidad en la duración del álbum: A08 se disfruta mejor cuando cada tema se considera por méritos propios.
La artista de avant-pop Mary Ocher cuenta con una discografía muy notable y variada, y en su último álbum Approaching Singularity: Music For The End Of Time recurre sistemáticamente a la música electrónica. La artista, criada en Tel Aviv y afincada en Berlín desde hace muchos años, ha elaborado un ensayo que acompaña al apocalíptico título de su obra, en el que reflexiona sobre el futuro de la humanidad en un mundo sacudido por tendencias autoritarias, extremos políticos y proliferación de tecnologías. Su voz, fuerte y polarizadora, entabla debates sobre la autoridad, la identidad y el conflicto, permitiendo que sus visiones de un futuro mejor trasciendan su música.
En Visionäre Leere, la "música pop disidente" Bernadette LaHengst también aborda temas de futuro. El cambio climático y estructural, la guerra y la política son temas tan importantes como su propia relación madre-hija. En su nuevo single Gib' mir meine Zukunft zurück, deja el estribillo vocal a su hija Elle Mae (Hengst), de 19 años. El resultado es otro de los himnos pop optimistas y combativos por los que Bernadette LaHengst es conocida desde que entró en la escena musical alemana a principios de los 90 como cantante y guitarrista del grupo pop hamburgués Die Braut Haut ins Auge.
Casi sin ayuda de nadie, LaHengst ha compuesto, grabado y producido su pop conmovedor de forma tan competente que uno puede perdonar sus debilidades líricas y sus interludios de rap de mala calidad. Sin embargo, es dudoso que la guitarra viajera Vox Apache que luce orgullosa en las fotos de prensa pueda siquiera escucharse en el álbum, ya que la perfección musical parece haber sido el objetivo, incluso más que en sus producciones anteriores.
Beirut
And we had so many plans
Leap from the sill, see where we land
El santafesino Zack Condon, mejor conocido como Beirut, ahora afincado en Berlín, lleva desde 2006 apostando por el indie folk con elementos de world music y jazz. Cuando en 2019 alquiló una isla en Hadsel (Noruega) en busca de paz y tranquilidad, descubrió un "órgano de bomba" en la casa que alquilaba, que se convirtió en la inspiración para el sonido de su nueva producción. De vuelta en Berlín, tuvo que encerrarse debido a la pandemia y pudo terminar de producir el álbum que lleva el nombre de Hadsel en paz y tranquilidad y, al igual que con su primer álbum hace casi 20 años, todo por sí mismo en estilo DYI probado y comprobado. Ni que decir tiene que resultó estupendo, lleno de calma contemplativa y bellos sonidos orgánicos de los instrumentos de la extraordinaria colección del artista, así como de su característico barítono.
El supergrupo alemán Oum Shatt anuncia grandes cosas, seis años después de la publicación de su fantástico debut Gulag Orkestra. Surf americano, rembetiko griego, no wave y diversas influencias orientales son las piedras angulares de sus nuevas canciones, que saldrán a la venta el 26 de enero.
Liderados por los pasajes vocales en forma de mantra del cantante y compositor Jonas Poppe y la percusión a veces salvaje del batería Chris Imler, crean una vez más su propio sonido a pesar de las diversas influencias. Un buen comienzo para un año que, sin duda, no será fácil.
