Historias de progreso  ¿Tomar asiento?

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¿Son las historias de progreso en la literatura motivadores útiles o cuentos de hadas manipuladores? Pertenecer (o no pertenecer) era ante todo una cuestión económica en el siglo XX. La visión de la dinámica social ha evolucionado desde entonces, y la clasificación en clases sociales va ahora más allá de los factores puramente económicos.

Pero la literatura a menudo se lo pone fácil: si lo quieres, puedes "lograrlo" es el credo, y al público le gusta. Se ignoran numerosos factores, y la receta del éxito de toda una serie de libros publicados en los últimos años parece cuestionable.

SOCIEDAD DE CLASE MODERNA

Las sociedades producen barreras debido a diversos factores que determinan las estructuras sociales de sus miembros y dan lugar así a una especie de "sociedad de clases moderna". El concepto ideológico de clase acuñado por Marx y Engels probablemente haya pasado algo de moda entretanto. Sin embargo, la cuestión de los ingresos y la propiedad de una persona ya no es la única característica utilizada para determinar su posición dentro de la sociedad. Mientras que Marx consideraba a los "marginados" principalmente en el contexto de los que están fuera del sistema capitalista, la realidad en 2024 es más compleja. Desde los años ochenta, el sociólogo francés Pierre Bourdieu viene señalando las influencias religiosas y culturales que, junto a los factores económicos, favorecen la clasificación de la población. Según Bourdieu, los diferentes entornos culturales son el caldo de cultivo y la definición de las disparidades sociales. En la literatura, el sentimiento de estar fuera de una determinada "clase" sirve a menudo de plantilla para historias en las que los protagonistas toman sus vidas en sus propias manos y logran un ascenso vertical como un cohete a través de las clases sociales por pura fuerza de voluntad.

ENTRE DOS EXTREMOS

Un buen ejemplo de esto es la novela autobiográfica del periodista y escritor alemán Christian Baron, Ein Mann seiner Klasse (Un hombre de su clase), en la que aborda sus experiencias de la infancia y el deseo de pertenecer. Describe la sensación de crecer en condiciones precarias dentro de un país rico y estar atrapado entre dos países. La novela causó controversia, pues es monocéntrica y gira en torno a la percepción de Baron de su propia historia, y no se puede derivar de ello ningún problema social general.

Pero justamente ése es su reclamo. Retoma el motivo del extranjero, que a menudo sirve de gancho para historias sobre la búsqueda de la integración. Estas historias casi siempre se tratan del intento de volverse parte de un nuevo "ambiente". Sin embargo, a pesar de sus mejores esfuerzos, los protagonistas sólo consiguen integrarse parcialmente a su nuevo entorno. La periodista Isabelle Rogge describe esta situación de la siguiente manera: "Durante mucho tiempo, no supe verbalizar bien este sentimiento. La sensación de que ya no pertenezco realmente a ciertos círculos y nunca perteneceré realmente a otros".

EL ESPACIO EN MEDIO

¿Pero cómo es posible acortar la distancia entre diferentes clases sociales y, en última instancia, dejarla atrás? Además de la confianza que los demás depositan en ti, sobre todo necesitas creer en ti mismo. Sin embargo, esto por sí solo rara vez es suficiente. Christian Baron ha logrado “subir la escalera de la educación”, como él mismo la llama. Aún así, el pasado le acompaña en el presente, manchado por el sentimiento de ser diferente. Un ejemplo actual lo ofrece el político estadounidense J.D. Vance, cuyo libro Hillbilly Elegy, publicado en 2016, aborda los problemas sociales de la clase trabajadora blanca estadounidense junto a la historia de su vida. Vance creció en el seno de una familia de clase trabajadora y tuvo que enfrentarse al desempleo y a la adicción desde muy joven. También abandona su hogar y aparentemente deja atrás el pasado. Tras servir en los Marines, se gradúa en la Facultad de Derecho de Yale, lo que le allana el camino hacia la política. Pero Vance regresa a su Ohio natal y se convierte en el candidato a vicepresidente de Donald Trump en 2024. También se pueden encontrar paralelismos con el cómico, podcaster y escritor alemán Felix Lobrecht, que cuenta una historia de vida similar en su novela Sonne und Beton. Lobrecht se esforzó por dejar atrás su difícil infancia en el complejo de edificios Gropiusstadt de Neukölln, en Berlín, y ascender a la clase alta académica. A pesar de su condición de estudiante de Ciencias Políticas y de sus esfuerzos por adaptarse —como llevar ropa alternativa y participar en el certamen de poesía—, tampoco logró integrarse en la élite de la clase alta. “Pero entonces me di cuenta de algún modo de que, aunque me pareciera a los demás, seguiría sin ser aceptado en este grupo”.

BANCAS Y BARRERAS

El término transclase (es decir “que cruza clases”) de la filósofa francesa Chantal Jaquet deja claro que las clases sociales no se funden simplemente unas con otras, sino que están separadas por barreras que dificultan el ascenso social. En la literatura, estos “cruces de fronteras”, como los llama Isabelle Rogge, suelen simplificarse e idealizarse, creando una imagen unilateral. También hay historias casi oníricas de ascenso social fuera de la literatura: Eminem, Oprah Winfrey o Céline Dion. Pero estos ejemplos suelen ser la excepción. De hecho, además de aptitudes excepcionales, fe y suerte, el ascenso social requiere sobre todo una cosa: trabajo duro.

Sin embargo, la integración real no sólo significa adaptación y transformación externa, sino también aceptación de la propia identidad. Un primer paso en la dirección correcta es reconocer la singularidad y complejidad del problema y ofrecer soluciones concretas, como mejores oportunidades educativas y acceso a la vivienda. Esto podría derribar gradualmente barreras y prejuicios y crear una sociedad más permeable e integradora. Una sociedad, por así decirlo, llena de bancas en lugar de sillas individuales, en la que los encuentros a la altura de los ojos sean posibles, independientemente del origen social.
 

sobre el libro

Christian Baron Ein Mann seiner Klasse
Ullstein, Berlín 2021
ISBN 9783548064673
Página de la editorial
El libro en la Onleihe

Christian, de 10 años, crece con sus tres hermanos y sus padres en circunstancias difíciles. Una puerta de entrada rota, un padre propenso a la violencia y problemas económicos acompañan la infancia del niño. Aunque Christian experimenta a menudo de primera mano la ira de su padre Otte, lo ve como una especie de héroe. Cuando Christian recibe una recomendación para ir al instituto, la relación entre padre e hijo cambia radicalmente. Mientras su madre, enferma de cáncer, está a favor del cambio de escuela y espera una vida mejor para Christian, Ottes se opone vehementemente. Con la muerte de su madre, el asunto parece decidido, de no ser por Juli, la tía de Christian, que quiere cumplir el deseo de su difunta hermana después de todo. 

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