Sinopsis
Tres lugares, tres conflictos y tres protagonistas: Hilda en Uganda, Rayén en Santiago de Chile y Pepper en Hong Kong. Estas historias cuentan los retos, las motivaciones y las consecuencias de su activismo. Ya sea por hacer justicia climática, por los problemas y desigualdades sociales o las amenazas a la democracia; el futuro siempre está en juego. Dear future children pretende hacer visibles las motivaciones de los activistas y examina la forma avanzada en la que se organizan estas protestas.
El proyecto generado a lo largo de dos años y finalizado en 2021 fue posible gracias a una exitosa campaña de crowdfunding, que recaudó más de 22.000 euros. En la producción de la película participaron, además de Böhm como director y el camarógrafo Friedemann Leis, cineastas, periodistas, activistas y una gran red de asesores y asesoras de más de 15 países.
Su director Böhm comentó en una temprana declaración de intenciones sobre el proyecto: “Con nuestra película queremos documentar la energía, la rabia, el ingenio de los diversos actores de la protesta internacional contra el cambio climático, la desigualdad social y la erosión de la democracia. Será un homenaje a las personas que se manifiestan desesperanzadas y se empoderan para actuar. Además, se mostrarán los efectos que tienen sus acciones en todo el mundo”.