Un texto que se niega a ser dicho como síntesis, a ser “recuperado” en sus contenidos, a ser subsumido en una sola voz. Y es en ese concierto de las voces, puestas a dialogar allí donde quizá nunca se hubieran encontrado en la vida, que comienza a perfilarse el relato como un verdadero laboratorio de identidad. Nada está definido de antemano, ni siquiera el principio de la historia. Ninguna identidad fija, invariable, aquí o allí. Más bien, derivas del discurso, vacilaciones, súbitos descubrimientos, formas reactivas de autoafirmación “allí” o travestismos de asimilación (“ser como ellos”), enfáticos –y a veces tardíos– reconocimientos del “nosotros”.
Leonor Arfuch
Radio Conversa es un espacio radial que promueve encuentros y conversaciones sobre memoria, territorio, tejido social y cultura; viaja y difunde las palabras, los relatos y el sentir de diversas comunidades en Colombia, desde la voz de los habitantes y líderes sociales, para consolidarse como un programa radial de libre acceso. El acto de conversar abre el camino, se trata de escuchar atentamente y de hilar las palabras, para ir avanzando en el tejido de un pensamiento colectivo.
Una casa de madera, de 3 metros de ancho por 6 metros de largo y 2.5 metros de alto, es el escenario en el que acontecen las conversaciones. Esta casa incorpora los procesos escultóricos del proyecto
La Casa de la Frontera, inspirados en algunas características de las viviendas de autoconstrucción progresiva que, en sus etapas iniciales, levantan gran parte de las familias en situación de migración forzosa que arriban a las periferias de las ciudades del país. Construida por Juan y Manuel Bermúdez –habitantes del barrio Bellavista del municipio de Soacha–, cuenta con travesaños, repisas y machimbre en madera que encierran un solo espacio, teja de zinc para el techo, una puerta, una serie de ventanas, y una adaptación a un sistema de montaje-desmontaje que permite su traslado.
Radio Conversa es el dispositivo estético escogido para esta segunda acción del laboratorio "Mnemofilia y Lotofagia", lo que da continuidad a algunos elementos explorados en la primera acción por Mapa Teatro.
La casa se dispone en el espacio público, por primera vez, en el barrio Bellavista de la Ciudadela Sucre, Soacha, y, a manera de un “preludio”, se genera la acción sonora
Escucha en la casa, en la que el artista plástico Leonel Vásquez, junto a algunos habitantes del barrio, hace un registro de diversos sonidos provenientes de los espacios domésticos, vecinales, y del contexto natural y urbano que rodea al barrio, para crear una pieza sonora que se socializa a la comunidad del sector durante un fin de semana.
Luego la casa se traslada a la localidad de Usme en Bogotá, a la Plaza Fundacional ubicada en Usme Centro, lugar en el que se graba un primer programa de Radio Conversa:
Territorios de Vida, que discute la urbanización y capitalización creciente de la vida, desde alternativas de organización social y campesina que muestran un cuidado de los recursos naturales y de los ecosistemas.
Posteriormente la casa se lleva a la localidad de Ciudad Bolívar, al Puente del Indio en el barrio Arborizadora Alta, lugar emblemático para los habitantes de la localidad. Allí se realiza una segunda grabación de Radio Conversa:
Culturas de la Memoria, que se enfoca en las prácticas artísticas y culturales como procesos vivos de memoria, en su capacidad de agencia poética y política desde las distintas comunidades.
Un tercer programa de Radio Conversa se lleva a cabo en la ciudad de Buenaventura, capital del departamento del Valle del Cauca y principal puerto marítimo del pacífico colombiano:
Ciudadanías Ancestrales, que aborda las relaciones con el territorio que están arraigadas a los conocimientos de los ancestros, que muestran otras formas de habitar, de construir comunidad y ciudadanía, y que actualmente se encuentran al margen de las políticas de desarrollo que imperan sobre el Puerto de Buenaventura.
Radio Conversa valora la construcción de vínculos sociales, a partir de una escucha personal y contextualizada, debido a la desinformación mediática que existe sobre la defensa de la memoria y de los territorios por parte de diversas comunidades en Colombia; y a los mecanismos de control social que se implementan con la guerra, con la violencia, y con la instauración de unas políticas de existencia que obedecen a los órdenes de un mundo globalizado, capitalizado y distante.
Vea aquí el cronograma de actividades.
Tras escuchar el testimonio de una víctima del conflicto armado en Colombia, en el marco de Experimenta/Sur, cinco expertos latinoamericanos de distintas disciplinas, una antropóloga brasilera-argentina (Ludmila Da Silva); un escritor del Caribe (Roberto Burgos Cantor); una juez colombiana (Gloria Guzmán); una psicoanalista brasilera (Suely Rolnik) y un politólogo colombiano (Iván Orozco), expondrán sus respectivos procedimientos de memoria: memoria antropológica, memoria poética, memoria judicial, memoria del trauma y memoria histórica.
El testimonio, recogido como parte del proyecto de Comisión de Verdad y Memoria de Mujeres de la Ruta Pacífica, será introducido por Alejandro Valencia Villa, abogado colombiano experto en comisiones de verdad, en compañía de la filósofa Adriana Urrea.
Posteriormente, los especialistas y artistas becarios activarán conjuntamente dichos procedimientos a través de cinco máquinas de memoria/olvido, diseñadas por Mapa Teatro. El objetivo es restituir espacial, temporal y poéticamente el relato inaugural para así hacer visible y problematizar el amplio y complejo dispositivo de la memoria, en particular en contextos de violencia como el que ha vivido Colombia. El laboratorio contará con la participación de 20 artistas becarios, seis expertos, artistas y curadores invitados, y diez testigos. Al finalizar, el público podrá ver en escena este ejercicio real y colectivo de elaboración simbólica.
El futuro de la memoria culminará en Bogotá con la presentación de “La fábrica de lo común”, concebida y dirigida por el colectivo Kom.post. Las memorias conflictuales y el territorio son puestos en un dispositivo performático de conversación, en el cual participan todas aquellas personas interesadas en debatir sobre esta dimensión de la memoria.
El dispositivo escénico consiste en reuniones heterogéneas en varias mesas, donde distintos interlocutores intercambian sus saberes y prácticas para así crear juntos una experiencia. “La fábrica de lo común” se escribe a partir de palabras y lenguajes singulares, pues los gestos, los cuerpos en movimiento y las actitudes de las personas también “hablan”. Este ciclo, propuesto en el marco del año Colombia-Francia, se inauguró a finales de enero en Cartagena y ahora transitará por ciudades como Bogotá y Barranquilla.